En cuestiones del amor, alguien me preguntaba qué pensaba sobre ello, con toda la experiencia de mi vida, la subjetividad contundente, con cada una de las heridas y nobles recuerdos le contesté que el AMOR NO EXISTE. Recordando un amigo a quien aprecio de verdad una vez, junto a su marida, comentó que el amor sólo es una calentura.
Reflexionando sobre el tema, en que, el amor es una calentura, me di a la tarea a observar a mis parejitas que me rodean y cuestionar en cada una de ellas qué es lo que los hace estar juntos. Terminé concluyendo que la mayoría de estas parejitas están o siguen juntos más que por amor, por costumbre y más que por costumbre por codependencia. Y así llegué a la misma conclusión en que el amor sólo es una calentura de un rato.
Estudios de investigación han revelado que el amor en una pareja no supera las 90 días, que esa es la etapa del enamoramiento, el resto es costumbre, querencia, comodidad. Otro estudio de investigación sobre las rutinas del ser humano revela que se necesitan 29 días haciendo algo constantemente para que se convierta en parte de tu vida, para que se llegue a acostumbrar a él como parte de una rutina. Si tomamos en cuenta este estudio, sólo bastan 29 días para que el amor se vuelva rutina. Sin embargo, otros estudios dicen o hacen saber que el amor dura más que 6 años, que el resto es pura palabrería.
Argumentando este tema no faltó el que lo cree todo y dice que el amor SÍ existe, claro me habla de una relación de 4 años esperemos que pase el 6to y si no es amor, no hay de que preocuparse, es costumbre, algo a lo que la mayoría del mundo estamos ya acostumbrados.
El amor en sí, puede variar de concepto en concepto, sobre todo porque el amor es demasiado subjetivo, es decir, cada quien platica como le fue en la feria. Lo que para mí es amor no puede ser para el otro, y lo que para el otro es el amor no puede ser para mí, porque cada uno de nosotros vivimos el amor de diferente manera. No existe o no puede existir una definición como tal del amor. Es verdad que el amor debiera serlo todo, entregarse todo, abandonarse todo, pero el ser humano aún no está preparado para ello. Somos demasiado egoistas como para permitir que el otro sea feliz si uno todavía no lo es. El ser humano nace buscando la felicidad sin saber que ésta no existe. Existen momentos felices, momentos que al final del tiempo forma una felicidad casi completa, una felicidad fragmentada. Muchos de ellos creen que encontrar el amor es encontrar la felicidad, pero bien sabemos que es sólo un fragmento de esa felicidad, aquellos momentos lindos, agradables, apasionantes. Deberíamos aprender a valorar esos pequeños detalles ya atesorar la felicidad, no como un todo sino como algo que completa lo que deseamos como felicidad. Es por eso que muchas parejas no duran, porque se empeñan en buscar la felicidad en el amor, y siendo honestos, son dos cosas muy aparte que muchas de las veces pueden ir de la mano, pero no precisamente obligatorio. La costumbre de una pareja, sin embargo, claro que da cierta comodidad, cierto formato de "felicidad" que nos obliga a seguir en la relación.
Yo soy de la idea que hay siempre que buscar la felicidad, mas no en el otro; y por otro lado no buscar el amor porque ese debe o debería llegar por sí solo. Algunos esperamos más, otros no tanto, otros toda la vida sin saber qué es el amor.
En fin, si el amor existe o no, si la felicidad se alcanza o no, me quedo con la frase de Sexo, pudor y lágrimas: "A coger y a mamar que el mundo se va acabar..."

